No caer en la tentación de releer los cuadernos;
no es momento de palentología.
No debería escarbar entre los recuerdos;
podría encontrarme con los aviones de papel que me fabricaba Ícaro,
para impulsarme a volar.
O las flores de papel que me regaló Pablo,
para que no me olvidara de las maravillas de la tierra.
Cosas mucho peores;
una sarta de estupideces escritas en tinta verde,
que una " amiga " se encargó de que llegaran a su destinatario
sin saberlo ni quererlo yo,
sin saberlo ni quererlo yo,
( uno de los momentos más bochornosos de mi vida ) , o
una pulsera de hilo que me regalaron con ojos tristes.
No.
Hay días que no puedes dejar atrás los recuerdos
que no pueden soportar una mudanza.
por mucho pragmatismo que quieras aportar en tus intenciones.
6 comentarios:
Pero si te mudas a una casa chalet con un pedazo de jardinero que pode bien tus flores....
Tengo un premio para ti
viernesssssssss yujuuuu
creo que lo importante es saberlo, comprenderlo, aprender y asi podemos dejar el pasado atras y luego pensar que solo "fue un mal dia"
Besos!
Hay días que están hechos de la materia que constituye la memoria, ¿no?
Creo que las mudanzas son procesos extrañísimos, pero nada que no podamos sobrevivir.
Mucha luz y todo mi amor para ti, bellísima :D
Deduzco que la mudanza comienza ya, eh? ¡Lo mas divertido es abrir las cajas luego!
Después de tantas mudanzas, aprendí a desahacerme de los viejos recuerdos que no me hacían bien. De todos, menos de un reloj que encontré hace unos días, después de 10 años, y del que ya me encargué de poner en hora y con pilas nuevas...de ese en concreto no me desprendería jamás.
Besos.
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