Ya saben que la Divina Comedia está compuesta de tres partes; el Infierno, el Purgatorio y el Paraíso. Cada una de ellas se publicó por separado, aunque formando parte del conjunto. Observen las coincidencias entre el texto del último Catón y el texto dantesco del Purgatorio - pasó las hojas hacia delante y hacia atrás, y buscó sobre mi mesa la copia transcrita del último bifolio del Códice Iyasus -. En el verso 82, Virgilio le dice a Catón "Deja que andemos por tus siete reinos", pues Dante debe purgar los siete pecados capitales, uno en cada círculo o cornisa de la montaña del Purgatorio: soberbia, envidia, ira, pereza, avaricia, gula y lujuria - enumeró. Luego cogió la copia del bifolio y leyó - "La expiación de los siete graves pecados capitales se realizará en las siete ciudades que ostentan el terrible privilegio de ser conocidas por practicarlos perversamente, a saber, Roma por su soberbia, Rávena por su envidia, Jerusalén por su ira, Atenas por su pereza, Constantinopla por su avaricia, Alejandría por su gula y Antioquía por su lujuria. En cada una de ellas, como si fuera un purgatorio sobre la tierra, penarán sus faltas para poder entrar en el lugar secreto que nosotros, los staurofílakes (1), llamaremos Paraíso Terrenal"
Matilde Asensi,
El Último Catón
El Último Catón
Ahora que la Iglesia católica, apostólica y romana ha proclamado que estos pecados se han quedado obsoletos en el mundo globalizado y actual, Matilde Asensi tiene un nuevo reto; construir una novela en la que se purguen los nuevos pecados capitales (2):
* No realizarás manipulaciones genéticas.
* No llevarás a cabo experimentos sobre seres humanos, incluidos embriones.
* No contaminarás el medio ambiente.
* No provocarás injusticia social.
* No causarás pobreza.
* No te enriquecerás hasta límites obscenos a expensas del bien común.
* No consumirás drogas.
* No realizarás manipulaciones genéticas.
* No llevarás a cabo experimentos sobre seres humanos, incluidos embriones.
* No contaminarás el medio ambiente.
* No provocarás injusticia social.
* No causarás pobreza.
* No te enriquecerás hasta límites obscenos a expensas del bien común.
* No consumirás drogas.
(1) Staurofílakes: Secta religiosa cristiana secreta, (ficticia), que se origina a partir del año 326 d.c. cuando Elena de Constantinopla, madre del emperador romano Constantino I el Grande, descubre la cruz donde Jesús de Nazaret fue crucificado, la Vera Cruz. Los Staurofílakes desde el principio han custodiado los fragmentos de la Vera Cruz y en la actualidad se encargan de ir recuperando los que (aún) quedan dispersos por el ancho mundo. Aquellos aspirantes a Staurofílakes, por cada prueba mortal que es superada, son marcados por otros Staurofílakes veteranos con unas escarificaciones en el cuerpo, con forma de cruces , y en la última prueba con letras griegas formando la palabra ΣΤΑΥΡΟΣ (STAUROS). En la novela, el primer Staurofílake que aparece y con el que se inicia toda la trama es el etíope Abi Ruj Iyasus, que aparece muerto en un accidente de avioneta, abrazado a una caja con unos trozos de madera (Lignum Crucis). Este etíope tiene por todo su cuerpo las escarificaciones de las cruces y las letras griegas. Entre los Staurofílakes, el equivalente al papa es denominado Catón. A lo largo de los siglos, hasta la actualidad, ha habido 257 Catones, elegidos por un consenso tras la muerte de el último Catón.
(2) Nuevos pecados capitales: El 10 de marzo de 2008, el regente del Tribunal de la Penitenciaría Apostólica del Vaticano, el Cardenal Gianfranco Girotti, presentó la siguiente lista, que ha sido divulgada ampliamente por los medios de comunicación, con la denominación de pecados sociales o nuevos pecados capitales. Según el "Osservatore Romano", periódico oficial de la Santa Sede, los tradicionales siete pecados enumerados por el Papa Gregorio I hace 1500 años, y recogidos después por Dante Alighieri en La Divina Comedia, se habían quedado viejunos. Así que el Vaticano ha decidido modernizar la lista, exhibiendo una atención especial a los llamados pecados sociales. El resultado son siete nuevos pecados capitales, que condenan como ofensas a Dios acciones tales como enriquecerse a costa de los demás (ejem...), la provocación o permisión de la injusticia social (ejejejem... ay, qué carraspera más mala tengo...), o las investigaciones científicas con implicaciones bioéticas.
2 comentarios:
como dice el Porta... la realidad varia segun los ojos del que mira... el cielo esta en la tierra y la tierra en el cielo. El paraiso esta en nuestra cabeza...
gracias por los sugus..
Yo incluiría como pecado al Vaticano...
Un placer leerte.
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