MAESTRO: Dicen que a través de las palabras, el dolor se hace más tangible. Que podemos mirarlo como a una criatura oscura, tanto más ajena a nosotros cuanto más cerca la sentimos.
(...) Pero yo siempre he creído que el dolor que no encuentra palabras para ser expresado es el más cruel, el más hondo, el más injusto.
Pasé mi vida amando a una mujer que amaba a otro que no la amaba a ella, sino a otra, de la que nunca supo si le correspondía. Era éste un tiempo en el que todavía podía mirar al futuro con más esperanza que miedo.
(...) Pero yo siempre he creído que el dolor que no encuentra palabras para ser expresado es el más cruel, el más hondo, el más injusto.
Pasé mi vida amando a una mujer que amaba a otro que no la amaba a ella, sino a otra, de la que nunca supo si le correspondía. Era éste un tiempo en el que todavía podía mirar al futuro con más esperanza que miedo.
A los que aman, 1998
No hay comentarios:
Publicar un comentario